“Las distracciones, una de las principales causas de accidentes con víctimas, están muy relacionadas con un mal uso de nuevas tecnologías durante la conducción. En este sentido, el vehículo autónomo y conectado nos ayudará mucho a reducir la siniestralidad en las carreteras. De hecho, el vehículo autónomo puede contribuir a que logremos una movilidad sin víctimas.” La directora del Servicio Catalán de Tráfico, Eugenia Doménech, se expresaba así en el marco del Connected Hub que tuvo lugar en el congreso Automobile Barcelona.
Con este convencimiento, el Servicio Catalán de Tráfico se ha convertido en uno de los principales impulsores del Catalonia Living Lab, el Foro Industrial para la Conducción Conectada y Autónoma, diseñado conjuntamente por la Generalitat, la industria y los agentes del sector. Esta plataforma se concreta en una red de localizaciones en Cataluña –en circuitos, carreteras, zonas industriales, espacios urbanos y parkings– donde empresas de todo el mundo podrán realizar pruebas en relación con el despliegue de estas tecnologías. De este modo, Cataluña se convertirá en un entorno de pruebas único en Europa en el ámbito del vehículo autónomo y conectado.
La iniciativa prevé que empresas catalanas y de todo el mundo, ya sean fabricantes de vehículos o de componentes de automoción, puedan llevar a cabo pruebas para desarrollar, realizar tests y validar la tecnología del vehículo autónomo y conectado en el marco de un entorno regulado que lo permita con las adecuadas garantías de seguridad.
En concreto, inicialmente está previsto que las pruebas se puedan llevar a cabo en varios puntos del país en tres circuitos –el de Barcelona-Cataluña, el de Castellolí y las instalaciones de Applus IDIADA–, siete rutas –que sumarán casi 200 km, con tramos, entre otros, en la AP-2 y la AP-7, donde ya se han realizado pruebas– y siete zonas abiertas –que superarán los 12 km2 de superficie–.
En su intervención en el Connected Hub, el consejero de Interior, Jordi Jané, explicó que “en casi el 92% de los accidentes de tráfico interviene el factor humano, y las nuevas tecnologías incorporadas a los vehículos tienen que conseguir que esta incidencia tan elevada se reduzca de forma considerable”. “Este es un gran reto“, remarcó, y añadió que “los nuevos elementos que se incorporan al coche lo hacen más seguro”.
La Generalitat, a través del Servicio Catalán de Tráfico, actuará como facilitar estas pruebas, que tienen por objetivo contribuir al desarrollo y transformación de la industria de la automoción en Cataluña, así como fortalecer su posicionamiento en todo el mundo y atraer nuevos proyectos de inversión extranjera de carácter productivo a nuestro país. Además, se trata de una iniciativa que quiere aportar valor añadido a la cadena de valor de la industria de la automoción en Cataluña e impulsar la estrategia del país en el ámbito de la industria 4.0, con la voluntad de liderar la cuarta revolución industrial en el sur de Europa.