Los móviles actuales permiten que, hoy en día, todos llevemos encima una cámara (fotográfica o de video). Registrar imágenes de todo aquello que nos rodea nos resulta más fácil que nunca y las redes sociales posibilitan una difusión amplia y rápida. Este hecho, que por un lado nos abre un mundo de nuevas posibilidades, también viene acompañado de ciertos peligros si se utiliza erróneamente. La posibilidad de difundir imágenes a través de las redes sociales tiene que ir acompañada de un alto grado de responsabilidad. Además, el deseo de conseguir estas imágenes no justifica comportamientos temerarios.
Grabar una infracción de tráfico
Cuando nos desplazamos por la red viaria o cuando estamos cerca de una carretera, podemos ser testigos de una infracción de tráfico que, incluso, puede llegar a poner en peligro a otros usuarios de la vía. La posibilidad de hacer fotos o de grabar imágenes es grande, sobre todo con el deseo de denunciar la infracción a las autoridades, pero también con la voluntad de difundirlo en nuestras redes sociales. Es en este punto, a la hora de decidir si difundimos o no las imágenes, que tenemos que hacer un ejercicio de responsabilidad.
La normativa de protección de datos, el Reglamento (UE) n.º 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo, relativo a la protección de las personas físicas en cuanto al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de estos datos, y la Ley orgánica 3/2018, de protección de datos personales y garantía de los derechos digitales, limitan esta publicación de imágenes en las redes sociales, sobre todo cuando se reconocen las facciones de la persona o la placa de matrícula del vehículo.
Por lo tanto, si se publican las imágenes de una infracción de tráfico, ¿se estará cometiendo un delito penal? La respuesta a esta pregunta no es clara. Incluso está abierto el debate sobre si la matrícula de un vehículo es o no un dato personal. Quizás la pregunta que habría que hacerse es: ¿por qué motivo se quiere difundir unas imágenes como estas, con qué objetivo? ¿Merece la pena correr el riesgo de un posible perjuicio? Es antes de difundir las imágenes que tenemos que realizar este ejercicio de reflexión. Porque si lo que se quiere es denunciar la infracción, hay mejores maneras de hacerlo. Lo explicamos precisamente en el artículo Cómo puedes denunciar una infracción de tráfico. Y hay que recordar que la primera opción si vemos a alguien conduciendo de forma temeraria es llamar al 112 para que avisen a la policía.
Grabar accidentes
Hace un par de años corrió por las redes sociales el video de un policía alemán en el que, al comprobar como algunos conductores grababan imágenes de un accidente de tráfico, se acercaba a uno de ellos y le decía: “¿Quieres ver gente muerta? Pues ven conmigo’’. Lo hacía precisamente para denunciar esta conducta de grabar accidentes, legalmente cuestionable, moralmente reprobable. No solo eso: esta acción puede generar retenciones, provocar otros accidentes ante los frenazos o velocidades inadecuadas e, incluso, entorpecer las tareas de los servicios de emergencias. A parte de que, si el que graba es el propio conductor, recibirá una multa por utilizar el móvil mientras conduce. En el artículo En caso de accidente, sigue el PAS indicamos qué pasos debes seguir si te encuentras un accidente, pero ya te avanzamos que grabar imágenes no es uno de ellos.
Grabar y grabar y grabar
– Controles policiales: Mucha atención también a la hora de grabar imágenes de mossos o policías locales realizando controles. Las personas que difundan este tipo de imágenes pueden ser denunciadas siguiendo la Ley orgánica 4/2015, de protección de la seguridad ciudadana, con multas muy elevadas.
- ¿Selfies de paquete?: El helicóptero del Servicio Catalán de Tráfico grabó unas imágenes en las que se ve a una chica que va de paquete en una moto haciéndose selfies mientras circulan por la carretera. La multa se la llevó la conductora, por adelantar en línea continua. Pero es evidente que la conducta de un paquete no tiene que ser esta, puesto que pone en peligro la seguridad de las dos, distrayendo a la conductora y desestabilizando el vehículo. ¿Todo ello para hacerse una selfie? Sin obviar la equipación de las dos, que no sería el más adecuado para ir sobre este vehículo de dos ruedas.
– Los retos virales: ¿Quién no recuerda el reto viral que se puso de moda hace unos tres años y que consistía en bajar del coche en marcha y ponerse a bailar al ritmo de la canción In my feelings? En su momento, los Mossos se vieron obligados a recordar que está prohibido grabar con el móvil mientras se conduce, conducir sin poner atención, desabrocharse el cinturón de seguridad mientras se circula o poner en peligro a terceras personas. Todas estas acciones se producían en el reto In my feelings.
Una cámara en mi coche
Como último punto, nos queda resolver la cuestión de la legalidad de llevar una cámara en el parabrisas del coche para grabar imágenes cuando el coche está en marcha. Por regla general, llevar una cámara en el vehículo está permitido. De hecho, ya existen en el mercado determinados modelos de vehículos que llevan instaladas de serie estas cámaras, que se activan o bien automáticamente en caso de colisión o a voluntad del conductor cuando este las acciona.
Aun así, también hay que tener presente que, según los artículos 18.2 del Real decreto 1428/2003 y 13.3 de la Ley de seguridad viaria, manipular esta cámara durante la conducción está catalogado como infracción grave, sancionada con una multa de 200 euros y la pérdida de 3 puntos del carné de conducir. Por otro lado, solo estaría autorizada para usos domésticos, dado que la Ley orgánica de protección de datos prohíbe expresamente la publicación de fotografías y videos sin el expreso consentimiento de las personas grabadas.