La iniciativa forma parte del plan de fomento del catalán en el sector de las autoescuelas
Abaniqueo y zona residencial. Estos son el primer y el último término del Diccionari de trànsit del TERMCAT, el diccionario de tráfico que ya se puede consultar en línea. La recopilación reúne, de momento, 1.339 palabras vinculadas a la circulación, los usuarios, el vehículo, la vía, la seguridad vial y el impacto ambiental, y presenta las denominaciones y la definición en catalán, así como los equivalentes en castellano, francés e inglés.
El diccionario de tráfico se publicó en el año 2000 en coedición con Enciclopedia Catalana y por iniciativa del Servicio Catalán de Tráfico (SCT). La recopilación fue elaborada por el TERMCAT –el Consorcio del Centro de Terminología–, con la colaboración de especialistas del mismo SCT y con el asesoramiento de expertos de otras instituciones.
El volumen incluye la terminología más propia o específica del tráfico, como la previsión, gestión, normativa de circulación o disfunciones (atasco, retención, etc.), así como referencias sobre educación vial o accidentes.
Próximamente, está previsto que se actualice con términos surgidos en los últimos años para designar nuevos vehículos de movilidad personal o relacionados con avances tecnológicos en la automoción, entre otros.
La versión en línea del diccionario de tráfico permite tres modos diferentes de consulta: mediante el acceso a la lista alfabética de todas las denominaciones (para cada uno de los idiomas del diccionario); a través del acceso temático (en catalán), o bien realizando búsquedas simples o avanzadas (en cualquiera de las lenguas).
El título forma parte de la colección de Diccionarios en Línea del TERMCAT, que engloba más de 170 recopilaciones de diferentes especialidades, entre las que se encuentran otros recursos relacionados también con el tráfico como el Diccionari de seguretat viària (diccionario de seguridad vial ) y el Diccionari de mobilitat sostenible (diccionario de movilidad sostenible).
Moverse, transitar, andar, conducir… son acciones que forman parte del día a día de las personas mayores, y así debe ser en un colectivo de la población veterano que cada vez es más numeroso y activo, pero también es necesario tener en cuenta que el envejecimiento a menudo viene acompañado de una mayor vulnerabilidad en las calles y carreteras.
Desde el Sercicio Catalán de Tráfico, para acompañar este proceso de hacerse mayor en la movilidad, coordinamos junto con los Mossos d’Esquadra charlas específicas de seguridad vial y editamos materiales como el de Grandes peatones o el Hazte ver. Además, aprovechamos cada edición de Fira Gran, como la de este año, para tener presencia y difundir consejos viales seguros.
En el stand del Departamento de Interior en Fira Gran de L’Hospitalet de Llobregat este mes de abril impartimos charlas dirigidas a las personas de la tercera edad sobre cómo se deben autoproteger en la movilidad y el tráfico para evitar sufrir accidentes.
También se reflexionó sobre la idea de que el derecho a la conducción no tiene límites de edad. De hecho, más de la mitad de los conductores siguen conduciendo después de los 75 años, si bien es necesario tener en cuenta la garantía de seguridad y el conocimiento de las capacidades y limitaciones de cada uno.
Asimismo, se puso sobre la mesa que cualquier actividad está ligada a cierto riesgo y que, a pesar de que el envejecimiento sea activo, pueden aparecer cambios físicos y cognitivos que hacen aflorar la fragilidad en la movilidad y hay que ser consciente de ello.
En este sentido, se destacó que el envejecimiento puede causar falta de reflejos y pérdida de algunas aptitudes para reaccionar ante imprevistos en el espacio vial, como conductores y también como peatones, y se trasladó este decálogo de consejos viales seguros para las personas mayores:
1) Como conductores, evitar conducir de noche, en horas punta o cuando hace mal tiempo y se recomienda evitar la conducción si se tienen problemas de concentración o una visión defectuosa.
2) También como conductores hay que procurar realizar recorridos conocidos e intentar viajar acompañados.
3) En zona urbana y como peatones, hay que vigilar sobre todo en las intersecciones y travesías por la confluencia de actores, que siempre perjudica al colectivo más vulnerable.
4) En la movilidad dentro de los pueblos y ciudades, se debe cruzar la calzada por los espacios señalizados o regulados por semáforos o agentes; si no hay ningún espacio regulado, utilizar el espacio más visible y nunca entre vehículos.
5) Yendo a pie, evitar los espacios compartidos con ciclistas o vehículos de movilidad personal para que un mal uso por parte de estos no comprometa la seguridad del colectivo más vulnerable.
6) No es recomendable andar por zonas de obras o espacios deteriorados.
7) En tanto que peatones de riesgo vulnerable elevado, se debe circular por el centro de la acera, ni muy pegados a la calzada para evitar atropellos ni muy cercanos a las fachadas.
8) Hay que tener muy en cuenta los riesgos elevados de una distracción: es necesario concentrarse en los movimientos de los demás usuarios para prever una reacción a tiempo y no consultar el teléfono móvil mientras circulamos.
9) Se considera obligatorio llevar una prenda reflectante, sobre todo cuando salimos o vamos solos o en condiciones climatológicas adversas.
10) Hay que tener en cuenta los efectos del incremento del consumo de medicamentos que pueden repercutir en la seguridad vial (somnolencia, disminución del nivel de alerta, alteraciones de la vista y la audición, vértigos y temblores, etc.).
El SCT, en colaboración con otros departamentos, consistorios y colectivos afectados, impulsa un dosier técnico de diseño de entornos e itinerarios escolares
En los últimos años se han desarrollado varios proyectos en todo el mundo enfocados a crear entornos e itinerarios escolares seguros que promuevan la movilidad sostenible (a pie o en bicicleta) y autónoma (sin acompañamiento de un adulto) de los niños en sus desplazamientos a la escuela. En el caso concreto de Cataluña, residen en ella 1.165.865 niños de entre 0 y 14 años y hay un total de 5.492 centros educativos de educación especial, infantil, primaria y secundaria, donde trabajan 117.398 docentes. Por tanto, estamos hablando de proyectos sobre un tipo de actividad –la escolar– que genera un número importante de desplazamientos diarios obligados y que tiene mucho que ver con la evolución de los patrones de movilidad.
El Servicio Catalán de Tráfico (SCT), en colaboración con la Dirección General de Infraestructuras de Movilidad (Departamento de la Vicepresidencia y de Políticas Digitales y Territorio), el Gabinete Técnico y la Subdirección General de Construcciones, Mantenimiento y Equipamientos de Centros Públicos (Departamento de Educación), el Ayuntamiento de Barcelona, el Ayuntamiento de Girona y Revolta Escolar (acción conjunta de las AFAs y AMPAs de toda Cataluña con la ayuda de entidades vecinales y ecologistas), ha redactado un dosier técnico con el objetivo de promover la movilidad activa, segura y sostenible en las escuelas y potenciar su protección como zonas sensibles. Además, también ha contado con el apoyo de Eixample Respira y de experiencias de bicibus.
Corresponsabilidad, planificación y buenas prácticas
El dosier insiste en que para favorecer la remodelación de los entornos escolares no se puede trabajar separadamente. Es necesaria la corresponsabilidad e implicación desde diferentes ámbitos y esferas de actuación. En concreto, la administración pública, la comunidad educativa, agentes del barrio como asociaciones vecinales, comerciantes y otras entidades, y otros como los servicios de mantenimiento y la policía local.
En cuanto al diseño de entornos e itinerarios escolares, establece una pauta de actuación. Ante todo, hay una fase inicial en la que es necesaria una iniciativa y un arranque del proyecto. Después se tiene que realizar un diagnóstico de la situación de partida. A continuación, se desarrolla el plan de acción y también es necesario hacer su seguimiento y evaluación. Además, conviene que exista participación, comunicación y divulgación del proyecto.
En relación con las actuaciones específicas que se pueden realizar, destacan las siguientes: la gestión de la movilidad (iniciativas para promover la movilidad autónoma de los niños en bici, bus, etc.; la mejora de la red de transporte público cercana a la escuela, acciones sobre el tráfico motorizado y la regulación del aparcamiento); el diseño urbano (red pedaleable, itinerarios peatonales, zonas de estancia, mobiliario urbano, pacificación del tráfico y mejoras en la señalización y la accesibilidad); la formación y educación (actividades en las aulas para promover la movilidad sostenible), y la sensibilización de todas las partes implicadas y la difusión (campañas de difusión).
Todo ello va encaminado a reducir el tráfico motorizado en los entornos escolares, reduciendo así la contaminación, el ruido y el posible riesgo viario que se puede derivar, y, teniendo en cuenta esto, recuperar así la función social y de juego del espacio público.
Por último, el dosier recoge una decena de buenas prácticas en cuanto a diseño de entornos e itinerarios escolares. En concreto:
Zonas libres de vehículos y tatuajes urbanos (eegión de Emilia, Italia)
Etiqueta de seguridad en la calle (Utrech, Países Bajos)
Acreditación STARS (Europa)
Madrid a pie, camino seguro al cole (Madrid, España)
Protegemos las escuelas (Barcelona, Cataluña)
Entornos escolares seguros y saludables (Granollers, Cataluña)
Red de coordinadores de movilidad (Girona, Cataluña)
Viajo contigo (Cataluña)
Bicibus y pedibus (varios municipios, Cataluña)
KanGo (Barcelona, Cataluña)
Se puede obtener información en el documento, el cual, como puede verse, se nutre de distintas experiencias, que sirven como fuente de inspiración o referencia y, a la vez, conforman ejemplos aplicados y, por tanto, lecciones aprendidas.
Cada vez están más presentes en las motos de última generación, a pesar de no ser obligatorias como las ADAS, las asistencias equivalentes de los coches
Los fabricantes de vehículos de dos ruedas, así como de sus componentes, hace tiempo que apuestan por mejorar la seguridad activa de las motos y desarrollar sistemas a través de la tecnología y la electrónica, unas ayudas a la conducción que, junto con los sistemas de seguridad pasiva, contribuyen a proteger a los motoristas, uno de los colectivos más vulnerables sobre el asfalto.
Estas ayudas se conocen comoARAS (sistemas avanzados de ayuda al conductor) y son el equivalente a los ADAS de los coches (en inglés, la R hace referencia a Rider, y la D, a Driver). Sistemas ABS avanzados, frenado combinado, señal de frenado de emergencia, sistema anticaballito (anti-wheelie), control de tracción, modos de conducción, control de presión de neumáticos, luces de circulación diurna, sistemas de iluminación frontal adaptable, detección de ángulo muerto, e-call… El listado de ayudas electrónicas disponible en las nuevas motos es cada vez más largo.
Fotos cedidas per ANESDOR (1. Radar frontal ACC de Continental y 2. ABS avanzado de KTM)
Más ARAS, menos accidentes
Los sistemas ARAS se basan en una lectura y sensorización completa de todos los parámetros de la moto para que el sistema electrónico sepa en todo momento la situación y el comportamiento del vehículo, de modo que, gracias a la tecnología y la electrónica, ayudan al motorista a pilotar con mayor seguridad y, en consecuencia, a reducir los accidentes. De hecho, un estudio elaborado por el fabricante Bosch –promotor de varias de estas ayudas electrónicas– establecía que 1 de cada 7 accidentes de motoristas podría evitarse si la moto contara con ARAS.
Entre los ARAS que encontramos en las motocicletas podemos mencionar, entre otros:
Control de crucero adaptativo: mide la distancia y la velocidad a la que la moto se acerca al vehículo precedente para mantener la distancia de seguridad entre ambos.
Control de tracción: evita que la rueda trasera derrape.
E-call: en caso de accidente, este sistema se comunica con el centro de llamadas de emergencia correspondiente y envía detalles del accidente a los servicios de emergencia. Entre los datos enviados se encuentra el momento del incidente, la posición exacta del vehículo accidentado y la dirección del viaje.
Detección del ángulo muerto: avisa al conductor mediante una señal óptica de la existencia de vehículos u objetos en su ángulo muerto.
Señal de parada de emergencia: situada en la parte trasera del vehículo, indica a los otros usuarios de la carretera que ha habido una frenada brusca relacionada con las condiciones de la carretera.
Sistema de iluminación frontal adaptable, que proporciona una iluminación mejorada en las curvas.
En este sentido, el secretario general de ANESDOR, la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas, José María Riaño, destaca que “estas asistencias pueden suplir posibles defectos en la conducción del piloto y ayudan a evitar situaciones difíciles, de forma que permiten conducir la moto con mayor seguridad. Por eso es recomendable, si se puede, escoger una moto moderna equipada con el mayor número de ARAS posible”.
Desde el pasado julio, el Servicio Catalán de Tráfico y la División de Tráfico de los Mossos d’Esquadra realizan patrullajes policiales en las carreteras catalanas con motocicletas mirilla no logotipadas. Las conducen agentes de paisano que detectan aquellas infracciones viarias que ponen en riesgo a los motoristas, ya sean cometidas por el propio colectivo como por otros usuarios de la vía pública.
A finales de septiembre, fuimos testigos de la actividad de una de estas motos mirilla en un tramo de la C-35. La agente que conducía el vehículo, la cabo de los Mossos d’Esquadra Montse Sauqué, recorría unos kilómetros de la vía haciendo una vigilancia discreta y no visible para el resto de usuarios. En caso de detectar conductas negligentes, avisaba por radio –a través del casco con micrófono– a los compañeros de dos patrullas uniformadas. Estos se esperaban en un punto de control ubicado más adelante en la misma vía y eran los que, finalmente, interceptaban a los conductores infractores y los paraban para sancionarlos.
Sauqué nos explicó que “este dispositivo tiene el objetivo de prevenir, controlar y vigilar, cualquier día de la semana y en el conjunto de la red viaria interurbana de Cataluña, todas aquellas conductas que comprometen la seguridad vial”, sobre todo la de los colectivos vulnerables, como son los motoristas. “De hecho, el factor humano interviene en casi el 90% de la accidentalidad en el tráfico, por lo que se incide en este tipo de infracciones que repercuten en este factor, ya sean las distracciones, el uso del móvil, adelantamientos irregulares como pueden ser en línea continua o por la derecha, la circulación por el arcén, la falta de distancias de seguridad y la falta de sistemas de seguridad pasiva”.
“La recomendación no deja de ser la del sentido común: que todo el mundo conduzca bajo la normativa del tráfico, que no solo porque haya una patrulla uniformada debamos actuar diferente. Así incidiremos directamente en la reducción de la accidentalidad” –añadió la cabo.
Desde 2010 mueren de media cada año en las carreteras catalanas 45 motoristas. La incorporación de estas motocicletas mirilla en las operativas policiales viarias es una medida disuasoria que pretende mejorar las condiciones de seguridad en la movilidad de los motoristas, aumentar la seguridad en las carreteras, pacificar el tráfico e intensificar los controles y la vigilancia vial para reducir la siniestralidad mortal y grave.
Los ocho primeros meses de actividad
Durante los ocho primeros meses de actividad, desde mediados de julio, se han realizado un total de 214 controles con las dos motos mirilla disponibles hasta ahora y con 20 agentes equipados.
Se han tramitado 1.094 denuncias. De estas, 143 a motoristas y 917 a conductores de otros tipos de vehículo.
En cuanto al tipo de denuncias: por uso de telefonía móvil, 486; por adelantamientos irregulares, 196; por un mal uso o bien por no llevar el casco y el cinturón, 99; por la documentación del vehículo, 41; en relación con el permiso de conducir, 26; por la ITV, 88, y por otros motivos, 158.
Las motocicletas mirilla han actuado en todo tipo de vía, tanto de la red principal como de la secundaria. Las vías principales por las que han patrullado son la AP-7, A-7, C-31, B-30, C-58, A-2, N-II, N-260, N-145, C-12, C-35, C-16 y C-63. Se han priorizado las carreteras que acumulan mayor accidentalidad mortal y grave.
Dependiendo de las necesidades de las diferentes áreas regionales de actuación, las dos motocicletas mirilla han patrullado a la vez, pero una en cada sentido de la marcha, en un radio de 20 kilómetros alrededor de un punto de control estático, al inicio o al final de este tramo. En otras ocasiones, y teniendo en cuenta también el contexto del territorio, solo ha sido necesaria la actuación de una de las motocicletas.
Desde el Servicio Catalán de Tráfico seguimos haciendo un llamamiento a la prudencia para contener la siniestralidad de este colectivo de dos ruedas y, sobre todo, pedimos más percepción del riesgo y conciencia de la propia fragilidad a los motoristas, así como respeto y prudencia hacia los motoristas por parte del resto de los conductores.
Presentar alegaciones y recursos a una multa, identificar al conductor o conductora de una infracción de tráfico, solicitar la devolución de ingresos indebidos o consultar los propios expedientes son algunos de los trámites del procedimiento sancionador de tráfico que se pueden hacer por medios electrónicos.
Para realizar estos trámites es necesario disponer de un certificado digital, aunque algunos trámites también se pueden hacer con la contraseña específica asignada a ese expediente. La contraseña se indica en el impreso de notificación que envía el Servicio Catalán de Tráfico (SCT). En la web del SCT encontrarás manuales que explican paso a paso cómo realizar estos trámites.
De acuerdo con la Ley de tráfico, una vez notificada una denuncia o acuerdo de incoación, la persona interesada dispone de un plazo de 20 días naturales, contados desde el siguiente al de la notificación, para presentar un escrito de alegaciones. Tiene que dirigir el escrito al Servicio Territorial de Tráfico que instruye el expediente sancionador, aportando o proponiendo las pruebas que considere pertinentes para su defensa.
Recuerda que, si se efectúa el pago con descuento, las alegaciones se considerarán como no presentadas.
También se puede presentar un recurso potestativo de reposición o un recurso extraordinario de revisión contra la resolución sancionadora.
Finalmente, se puede presentar un recurso de reposición contra la provisión de apremio ante la Agencia Tributaria de Cataluña.
Identificación de conductor/a
Es necesario hacer esta identificación cuando la Administración te ha enviado un requerimiento de conductor o conductora o cuando has recibido un acuerdo de incoación de oficio de un expediente sancionador, pero no eres la persona que conducía el vehículo en el momento de la infracción.
1. Si has recibido un requerimiento, la persona titular o arrendataria a largo plazo del vehículo, cuando la Administración se lo requiera, es responsable de facilitarle los datos de la persona que conducía el vehículo en el momento de la infracción. Tiene veinte días naturales para contestar, contados desde el siguiente al día que haya recibido la notificación de requerimiento. La persona que ha sido objeto de un requerimiento de conductor no puede abonar la sanción.
2. Si has recibido un acuerdo de incoación de oficio, tienes que identificar a la persona que conducía el vehículo en el plazo de veinte días naturales contados desde el siguiente al día que hayas recibido la notificación. Ten en cuenta que, si realizas el pago con descuento, el procedimiento finalizará y no se atenderá la identificación. La persona identificada dispondrá de un plazo para pagar con descuento a partir del momento en que se le notifique la denuncia.
Solicitud de devolución de ingresos indebidos
Cuando la persona denunciada ha pagado una denuncia o sanción y esta no es firme porque se han estimado las alegaciones o los recursos presentados o cuando se ha producido un pago en exceso, se puede solicitar la devolución del importe ingresado indebidamente.
Si el importe se ha abonado en periodo voluntario, es el Servicio Catalán de Tráfico quien tiene que hacer la devolución. En cambio, si el pago se ha realizado por la vía ejecutiva, su devolución corresponde a la Agencia Tributaria de Cataluña.
Puedes consultar tus expedientes. Si dispones de un certificado digital, debes entrar en este trámite e identificarte. La identificación también se puede hacer con idCAT Móvil.
Una vez te has identificado, puedes visualizar los expedientes sancionadores que el Servicio Catalán de Tráfico tiene abiertos con tu número de documento y puedes consultar los datos y la fotografía captada por el radar en las sanciones de velocidad.
Pago de sanciones
Las sanciones por infracciones de tráfico se pueden pagar tanto si tienes un certificado digital como si no. En la web del SCT encontrarás un manual detallado que lo explica.
App de tráfico
A través de la App de tráfico puedes consultar un expediente sancionador, pagar una sanción, identificar al conductor o conductora que ha cometido una infracción y presentar alegaciones.
Esta aplicación también ofrece otros servicios como consultar el mapa del tráfico, las cámaras, las restricciones al transporte de mercancías y consejos de seguridad.
Saltarse un stop. Cruzar una línea continua. Hacer un giro prohibido. La infracción de una norma de circulación o de una señal va más allá de un incumplimiento de la normativa de tráfico. A menudo, conlleva un siniestro con víctimas. A veces, estas víctimas son leves, pero también hay víctimas graves y mortales.
Es sabido que el primer factor concurrente en los accidentes de tráfico con víctimas son las distracciones (un 23% de los accidentes), con el móvil al frente. Pero, muy cerca de las distracciones, el segundo factor más habitual es la infracción de una norma de circulación, entendida como una infracción que tiene una incidencia directa en el siniestro (un 22% de los accidentes), por delante de otros factores como el error del conductor, el exceso de velocidad o el alcohol. Hay que tener en cuenta que en un mismo accidente pueden concurrir varios factores, como por ejemplo el exceso de velocidad y el error del conductor.
En los últimos años, las distracciones se han mantenido como principal factor concurrente. No obstante, si viajamos unos cuantos años atrás, cuando el móvil no estaba tan consolidado como elemento de distracción al volante, la infracción de una norma de circulación era el principal factor. Esto indica un predominio sostenido en el tiempo de un cierto comportamiento generalizado al volante que ignora o desobedece la normativa de circulación. Con las últimas modificaciones del Código penal, sin embargo, adelantar con línea continua o no respetar una señal de stop, por ejemplo, si supone la causa del siniestro y este ha provocado lesiones o la muerte de alguna persona, puede conllevar una responsabilidad penal para el conductor. De hecho, en el 42% de los accidentes con muertes y heridos graves de 2022 se imputó al conductor por un delito de lesiones o de homicidio por imprudencia grave, según datos de los Mossos d’Esquadra.
Las infracciones más habituales
“A menudo, nos encontramos en las colisiones por alcance que la infracción de la normativa ha sido no mantener la distancia de seguridad; en las embestidas, no respetar la señal de stop, de ceda el paso o de giro prohibido son infracciones recurrentes; cuando hablamos de colisiones frontales, además de las distracciones, la causa principal suele ser un adelantamiento en lugar prohibido o con línea continua”, detalla el sargento Rafa Aguilar, jefe del Área de Investigación de Accidentes de los Mossos d’Esquadra.
La receta más efectiva para evitar estas colisiones es la simple observación y respeto de las normas y señales de circulación. “Conducir por las vías donde es de aplicación la normativa de tráfico constituye una gran responsabilidad. Hay que poner siempre máxima atención en la conducción y en la señalización de la vía”, subraya el sargento Aguilar. “Cuando se adquiere una cierta experiencia en la conducción, se tiende a bajar la guardia y lo cierto es que una sola distracción, un exceso de confianza, no respetar una señal, puede tener consecuencias trágicas tanto para el propio conductor como para el resto de usuarios, más aún si se trata de usuarios vulnerables”, añade.
Es primordial, por lo tanto, dejar de normalizar la infracción de una norma de circulación como algo cotidiano o incluso “inevitable”. Detrás de esta infracción puede haber un accidente con víctimas y, en función de las lesiones y del tipo de imprudencia, la infracción puede acabar en delito.
90 municipios catalanes de menos de 50.000 habitantes llevarán a cabo proyectos de mejora con un programa pionero del Servicio Catalán de Tráfico
Pacificación y ordenación de travesías, construcción de carriles bici y vías verdes, establecimiento de itinerarios peatonales, ampliación de aceras, accesibilidad de pasos de peatones o instalación de radares pedagógicos. Son algunos de los proyectos vinculados a la movilidad segura, sostenible e inteligente, la pacificación del tráfico y la reducción de la accidentalidad en el ámbito urbano que casi un centenar de municipios de menos de 50.000 habitantes pueden empezar a desarrollar gracias a las subvenciones que el Servicio Catalán de Tráfico ha impulsado, por primera vez, con este propósito.
Un programa dotado con 10 millones de euros
A esta primera convocatoria del programa de subvenciones a entes locales se presentaron más de 200 consistorios, de los que 122 cumplían los requisitos mínimos, y 43 fueron los adjudicatarios provisionales. En principio, se había previsto una dotación de cinco millones de euros, pero se acabó doblando vista la cantidad de municipios presentados, la calidad de los proyectos y que muchos quedaban fuera de la convocatoria. Así, con unadotación final de 10 millones de euros, el programa permitirá ejecutar proyectos en un total de 90 municipios.
Mejora de travesías y pasos accesibles
La mayor parte de las obras, que deben ejecutarse en 18 meses, se centrarán en mejorar travesías, espacios donde habitualmente se concentra el mayor porcentaje de siniestralidad en zona urbana, y también en promover la accesibilidad en pasos de peatones. Algunos municipios también destinarán la subvención a ampliar aceras, poner semáforos para pacificar el tráfico o ejecutar caminos peatonales y carriles de bicicletas, en una apuesta clara por la movilidad activa y la seguridad de los colectivos más vulnerables. También se han aprobado actuaciones destinadas a reducir la velocidad de los vehículos privados, limitar su uso y promover la movilidad del vehículo eléctrico.
Entre los 90 ayuntamientos adjudicatarios, que recibirán ayudas de hasta 150.000 euros con los que deben financiar la totalidad de la obra que hayan previsto, se encuentran desde micropueblos hasta capitales de comarca. En cuanto a la distribución territorial, 28 son de la demarcación de Barcelona (entre otros, 5 de L’Anoia, 5 más de El Vallès Oriental y 4 de El Bages), 26 de Lleida (donde hay 5 municipios de El Segrià, 4 de La Noguera o 4 de El Solsonès), 26 de Girona (donde destacan 10 municipios de L’Alt Empordà y 5 de El Baix Empordà) y 10 de la demarcación de Tarragona.
Lucha contra la accidentalidad en el ámbito urbano
El pasado año, en Cataluña, el 30% de las víctimas mortales de tráfico se produjeron en el ámbito urbano. En concreto, 68 personas murieron en accidentes en pueblos y ciudades del país. De estas víctimas mortales, 8 de cada 10 pertenecían a colectivos vulnerables, como son motoristas, ciclistas y peatones.
Desde el Servicio Catalán de Tráfico hace tiempo que trabajamos en colaboración con los municipios para llevar a cabo políticas locales de seguridad vial; entre otros, establecemos convenios de colaboración con los municipios y sus policías localesy tenemos una línea de apoyo a los municipios para la elaboración de los planes locales de seguridad vial (PLSV) y trabajos técnicos de seguridad vial.
Con este nuevo programa, y en consonancia con lo establecido en el Pacto Nacional por una Movilidad Segura y Sostenible, damos un paso más para impulsar actuaciones vinculadas a la movilidad segura, sostenible e inteligente, la pacificación del tráfico y, en definitiva, para continuar trabajando en la reducción de la accidentalidad en el entorno urbano.
Conducir con hielo es una situación peligrosa que hace que tengamos más posibilidades de perder el control del vehículo, y que en Cataluña puede pasar sobre todo entre los meses de noviembre y marzo en las zonas más interiores y de montaña. Las placas de hielo no solo se forman allí donde ha nevado. La caída de temperaturas, sobre todo durante la noche y la madrugada; el frío después de llover, la humedad permanente o la niebla engelante son fenómenos que están relacionados con las heladas y que provocan que el hielo haga acto de presencia en las carreteras.
A lo largo del 2021 hubo en la red vial catalana 107 accidentes en asfalto helado, nevado o resbaladizo, y 161 en 2021. Si miramos atrás, desde el 2010 se han registrado en estas condiciones de hielo en la calzada o suelo deslizante alrededor de 2.000 accidentes, de los cuales 9 han sido mortales.
Aunque a veces es un elemento inesperado y que nos puede coger desprevenidos, el agente de tráfico Joan López, coordinador de Educación para la Movilidad Segura de la Región Policial Central de los Mossos d’Esquadra, nos da algunos trucos para saber cómo prevenir y afrontar el hielo en el asfalto.
1) PREVENCIÓN
La gran mayoría de vehículos de hoy en día, cuando la temperatura exterior es inferior a 4 grados, avisan de la posible existencia de hielo en la carretera, cosa que tenemos que tener en cuenta para tomar medidas preventivas.
El hecho de ver el asfalto blanco o brillante también nos puede indicar que hay hielo, pero a menudo lo que vemos en la carretera son los productos salinos que, ante episodios de bajas temperaturas, se utilizan para evitar que se formen las placas de hielo.
2) UBICACIÓN
Aunque las placas de hielo pueden pasar totalmente desapercibidas a la vista, hay unos lugares y condiciones que las hacen más probables y previsibles. El hielo en las carreteras puede formarse en cualquier sitio húmedo y perdurar durante el día allí donde no toque el sol.
Además, también es probable encontrarlas en las entradas y salidas de los túneles, en los puentes y zonas próximas a los ríos.
3) CONSEJOS
En la conducción con situaciones meteorológicas que afecten a la adherencia del vehículo, es determinante que los neumáticos estén en buen estado.
No se puede reducir bruscamente la velocidad, tenemos que ir mucho más lentamente y conducir con suavidad: en caso de entrar en una zona con placas de hielo, se podrá controlar mejor el vehículo.
Hay que acelerar poco a poco para favorecer la adherencia de los neumáticos al asfalto.
Hay que conducir con la marcha más larga posible y mantener la dirección recta.
Si la parte posterior del vehículo se descontrola, hay que girar el volante en la dirección opuesta para enderezar la trayectoria.
Si hay más coches circulando, hay que aumentar la distancia de seguridad: el hielo hace duplicar o incluso triplicar la distancia de frenado.
El agente López remarca también que “si te desplazas por zonas de montaña o de bajas temperaturas constantes, es muy recomendable llevar neumáticos de invierno, o bien los nuevos cuatro estaciones, ya que se evitarán posibles sobresaltos y situaciones desagradables”. Conviene destacar que las características de los neumáticos de invierno los hacen útiles no solo sobre nieve, sino en una gran diversidad de suelos, donde tienen una mejor adherencia y respuesta de frenado a baja temperatura.
Hielo en el parabrisas
Con Joan López también hemos repasado las soluciones para evitar el hielo en el vehículo. Cuando las temperaturas son bajas y tenemos el coche estacionado en la calle, es probable que por la mañana tengamos el parabrisas helado. La mejor manera de evitarlo es ser previsores y, si no podemos poner el vehículo a cubierto, se puede cubrir el cristal con un plástico, manta o cartón.
Si no hemos tenido esta previsión y el cristal está cubierto de hielo, lo mejor es utilizar algún producto anticongelante específico. Si no tenemos, habrá que utilizar un producto que tenga una alta graduación de alcohol y que no lleve grasas porque engrasaría el cristal. Para ayudar a sacar el hielo también se puede utilizar una rasqueta de plástico.
Otro recurso es poner en marcha la calefacción con el ventilador al máximo cuando arrancamos el motor del vehículo, ya que el calor será progresivo y no habrá cambios bruscos de temperatura. Antes de iniciar la marcha, hay que sacar el hielo de todos los cristales, también de los laterales y los retrovisores.
Sobre todo, ten en cuenta lo que no podemos hacer:
Provocar contrastes de temperatura muy repentinos, como por ejemplo aplicar agua caliente o enfocar aire de temperatura elevada contra el parabrisas. El cristal se puede resquebrajar o incluso romper.
Activar los limpiaparabrisas, porque es muy probable que estén pegados al hielo y se estropeen.
Tirar sal: aunque es un producto que evita la congelación, no descongela. Se podría rayar el cristal innecesariamente.
Aplicando una mirada de género a la seguridad vial se pone de manifiesto que las mujeres tienen menos accidentes y son menos infractoras.
Las mujeres tienen menos accidentes de tráfico y son menos infractoras en la conducción. Esta es la conclusión de aportar una perspectiva de género a los datos de la siniestralidad vial en Cataluña. Concretamente, el 75% de los muertos por accidente de tráfico son hombres y el 25% son mujeres, aunque la distribución de los permisos de conducir en la actualidad se sitúa en 57% para el sexo masculino y 43% para el femenino.
En este sentido, la subdirectora de Seguridad Vial, Anna Pintó, asegura que “la movilidad no es neutra, hay comportamientos diferenciados entre hombres y mujeres y los datos también rompen el estereotipo de que las mujeres conducen peor”. Pintó añade que “la conducción de las mujeres es más colaborativa y prudente frente a la conducción más competitiva y menos valorativa de los riesgo de los hombres”.
Los conductores son más infractores que las conductoras, dado que un 88% de las denuncias policiales por consumo de alcohol y drogas en la conducción son a hombres, y en los excesos de velocidad el 70% de los expedientes sancionadores también lo son. Imma Gonzalo, directora y formadora de la autoescuela Goncal Formació, asegura que “el hombre, incluso por naturaleza, es más atrevido, más imprudente, más inseguro, se atreve al riesgo. Parece que le gusta este factor de riesgo y de intensidad en la carretera”. Además, en los cursos de recuperación del permiso de conducir y de puntos la gran mayoría de asistentes son conductores hombres. “Mujeres vienen muy pocas y estas a veces no han cometido ellas la infracción”, afirma Gonzalo.
Según los expertos, la denominada ‘masculinidad dominante’ estaría detrás de las conductas de riesgo e infractoras en la conducción. “Las estadísticas hablan por ellas solas y en los hombres, fruto de esta construcción de nuestra masculinidad patriarcal, machista y de los modelos que hemos tenido, pues realmente hay una conducta de temeridad y de infringir las normas”, afirma Rubén Sánchez, subdirector de Sensibilización y Prevención del Departamento de Igualdad y Feminismos.
Por otra parte, una guía del Instituto de Biomecánica de Valencia sobre cómo mejorar la seguridad de las mujeres en los coches autónomos del futuro revela que, actualmente, los vehículos son menos seguros para las conductoras y que tienen un 17% más de probabilidades de morir en caso de accidente. José Solaz, director científico del Instituto de Biomecánica de Valencia, explica que “hay un interés en el cambio, pero arrastramos una historia de ingenieros diseñando para conductores masculinos: hombre de entre 30 y 50 años de población norteamericana o centroeuropea, y eso lo tendríamos que desmontar de alguna manera”.
Ante el sesgo de género, el Servicio Catalán de Tráfico apuesta por poner en el centro de la seguridad vial los valores femeninos de prudencia y de rechazo a las conductas de riesgo para tender hacia una conducción más respetuosa. Es una realidad que hay que tener en cuenta y, en este sentido, el SCT ya está aplicando parámetros de perspectiva de género en el ámbito de la seguridad vial y de las acciones formativas y educativas a través del Plan de seguridad vial 2021-2023.